Aníbal Troilo
Nombre real: Troilo, Aníbal Carmelo
Seudónimo/s: Pichuco
Bandoneonista, director y compositor.
(11 julio 1914 - 19 mayo 1975)
Lugar de nacimiento:
Buenos Aires Argentina
Aníbal
Troilo nació en la calle Cabrera 2937, entre Anchorena y Laprida (en pleno
barrio del Abasto)1 pero desde los ocho años de edad (después de la muerte de
su padre) vivió en Soler 3280, entre Gallo y Agüero.Sus padres se llamaban
Felisa Bagnoli (hija de Marco Bagnoli Giaccio y Maria Raffaella Sammartino, de
Agnone, en Campobasso, hermanos Americo, Nicolás, Arsenio, Carmelo, Anunciación
y Ernesta) y Aníbal Troilo (hijo de Quirino y Concepción, de Archi, en Chieti).
Se habían casado en la iglesia de Balvanera el 11 de noviembre de 1909. Los
apellidos de la familia materna incluyen entre otros: Busico, d'Agnillo, di
Curtis, Santarelli y La Banca. Su padre le pondría el seudónimo de Pichuco,
nombre por el cual llamaban a uno de sus mejores amigos; el apodo podría ser
una deformación del napolitano picciuso que significa "llorón".Tuvo
dos hermanos, un varón, Marcos, y una mujer, Concepción, que murió de corta
edad.Durante su niñez, Troilo escuchaba tocar el bandoneón en los bares de su
barrio. A los 10 años convenció a su madre para que le comprara su primer
bandoneón. Felisa lo compró a 140 pesos de entonces, a pagar en 14 cuotas de 10
pesos; pero luego de la cuarta cuota el vendedor desapareció y nunca reclamó el
resto.
Con ese
bandoneón, Troilo tocó casi toda su vida.
Un año
después, en 1925 (cuando contaba con 11 años de edad) Pichuco realizó su
primera actuación, en un bar pegado al Mercado de Abasto (el mercado central de
frutas y verduras de Buenos Aires). Más tarde integró una orquesta de
señoritas. A los 14 años ya había formado un quinteto.Estudió hasta tercer año
en la prestigiosa Escuela Superior de Comercio Carlos Pellegrini.En diciembre
de 1930 fue contratado para formar parte del famoso sexteto del violinista
Elvino Vardaro, el pianista Osvaldo Pugliese y Alfredo Gobbi (hijo) (quien era
apenas el segundo violín del conjunto, pero más tarde se haría célebre como
director de orquesta). Allí tuvo como compañero a Ciriaco Ortiz, de quien
Troilo más adelante se consideraría deudor. Ese sexteto no realizó ninguna
grabación discográfica.
Troilo pasó
por numerosas orquestas, entre otras, las de Juan Pacho
Maglio, Julio de Caro,
Juan D'Arienzo, Ángel D'Agostino y Juan Carlos Cobián. Con su orquesta (cuyos
integrantes fueron variando muchísimo) trabajó casi ininterrumpidamente, tanto
en presentaciones en vivo como en grabaciones, hasta el año de su muerte, 1975.
En 1953,
Troilo formó un dúo con el guitarrista Roberto Grela para actuar en la obra de
teatro El patio de la morocha (más parecida a un sainete que a un musical) de
Cátulo Castillo, donde Troilo interpretaba el papel del bandoneonista Eduardo
Arolas tocando junto a Grela. El dúo, que participó también en algunas
películas y realizó varias presentaciones (incluso acompañando a cantantes),
pasó luego a ser el Cuarteto Típico Troilo-Grela, con la incorporación de
Edmundo P. Zaldívar (h.) en guitarrón y Enrique "Kicho" Díaz en
contrabajo. Con esta formación grabó doce temas entre 1955 y 1956. En 1962, el
cuarteto volvió a grabar diez temas más, ahora con Eugenio Pro en contrabajo y
Ernesto Báez en guitarrón. En ambos casos, los temas son instrumentales. El
sonido del bandoneón de Troilo es fácilmente reconocible, y cambia
relativamente poco a lo largo de su vida (comparado, por ejemplo, con el sonido
resultante de la orquesta), y a través de las distintas agrupaciones. Se
caracteriza por un fraseo impecable, por una forma muy particular (y también
muy propia del tango) de «decir» las frases melódicas con su instrumento. Los
solos de bandoneón de Troilo habitualmente son ejecutados con volumen bajo
(incluso cuando toca sobre toda la orquesta, lo cual es asombroso) y con
extrema delicadeza. Sus ejecuciones son delicadamente pausadas, pero no
necesariamente lentas, y casi nunca tienen muchas notas rápidas, excepto cuando
ejecuta variaciones, claro está (Las variaciones son un recurso propio del
género que consiste en un solo ejecutado con rapidez sobre la melodía ya
conocida del tango, que suele utilizar cuatro notas por cada tiempo del compás
y encontrarse al final del tema). En 2005 el Congreso de la Nación Argentina
declaró la fecha del 11 de julio (natalicio de Pichuco), como el Día Nacional
del Bandoneón mediante la ley 26.035. Fue sancionada el 18 de mayo de 2005 y
promulgada de hecho el 16 de junio de 2005. Los propulsores de esta ley fueron
Francisco Torné, nieto de Zita Troilo, y el poeta Horacio Ferrer, amigo del
músico y presidente de la Academia Nacional del Tango.