La muerte de 26 operarios en una explosión consterna a la petrolera estatal mexicana. Quieren saber si hubo sabotaje narco o fallas electrónicas. También hay 7 desaparecidos.
La violenta interna por la explotación de una veta de estaño ya dejó un muerto y 10 heridos. Ahora, esperan que el Gobierno de Evo Morales medie en el conflicto.
En la madrugada de este miércoles 19 de septiembre, las dos facciones mineras firmaron un Acta de diálogo de cinco puntos, que no trascendieron.
Ambos grupos de trabajadores se disputan el control de la mina desde que ésta fuera expropiada por el gobierno en junio a una filial local de la empresa suiza Glencore.
Esta tregua no supone el fin del conflicto, pero compromete al Gobierno a encontrar soluciones a la demanda de los asalariados, que se mantienen en vigilia en La Paz.
Durante la jornada del martes 18, con una multitudinaria marcha hacia la capital boliviana, los trabajadores de cooperativas exigieron al Gobierno que cumpla un acuerdo de explotación parcial de una rica veta estañífera de la mina Colquiri, 250 km al sur de La Paz, medida a la que se oponen los mineros de la empresa estatal.
Durante las manifestaciones, un grupo de cooperativistas lanzó dinamita contra la sede sindical de los mineros del Estado, informó el jefe de la policía regional, coronel Rosalío Álvarez.
El acuerdo de tregua por 48 horas entre los sectores enfrentados por la mina Colquiri se realizó en el Fondo Nacional de Desarrollo Regional con la participación del ejecutivo de la Central Obrera Boliviana, Juan Carlos Trujillo, del ministro de Trabajo, Daniel Santalla, y del viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, César Navarro.
Fuente: infobae.com